Los
rabinos judíos prohibieron que se pronunciara el nombre de nuestro Elohím (Señor)
e incluso dijeron que el que pronuncia Su nombre no tendrá una porción en el
mundo venidero.
Al
parecer estos sabios sean creídos más "religiosos" que Moisés, que
escribió "Reverenciaras a YAHWEH, tu Dios, a Él servirás, a Él te unirás y
juraras en su Nombre” (Dt 10,20).
E
incluso más que el rey David quien pronunció las palabras del Sal 22,22. Esto
genera ciertas preguntas:
¿Cómo
podemos anunciar El Nombre o invocarlo si se prohíbe pronunciarlo?
¿Por
qué es importante la pronunciación del Nombre que ha de ser anunciado?
¿Cuál es la pronunciación más exacta, en
arameo, del Nombre Divino?
¿Será
cierto que se perdió dicha pronunciación?...
Muchas
personas opinan bíblicamente que pronunciar debidamente el nombre "YAHWEH"
es esencial para "la salvación", (Joel 2,32).
Y
así se hizo patente en un comentario de los editores del Libro religioso
"Let Your NameBe Sanctified" (IBSA. Ed.1961) en pág 15, párr.10
edición española: "Toda persona desea no solamente que su nombre sea
tratado con el debido respeto, sino también que se pronuncie
correctamente".
Nuestro
Señor Jesucristo LO PRONUNCIO
"En
ti confiarán todos los que conocen tu NOMBRE" dice el Salmo 9:10. De ahí
que Nuestro Señor Jesucristo reconocía que no solamente se trataba de conocerle
por su nombre distintivo, sino también de tener fe en Él, aprendiendo acerca de
su manera de ser, sus cualidades y criterios, lo que a su vez le infundió
confianza absoluta.
En
Lucas 4,18-19.28 tenemos la clara seguridad de que Nuestro Señor Jesucristo
pronunció el NOMBRE DE DIOS: YAHWEH.
El
Maestro lee públicamente, en la Sinagoga de Nazaret, el rollo de Isaías,
probablemente una copia de la versión de los LXX aramea que contenía el llamado
Tetragrámaton (YHWH), donde dice (Is 61: 1,2): "el Espíritu de YAHWEH
Dios, está sobre mí, porque YAHWEH me ha ungido... para proclamar el año
favorable de YAHWEH..." (Biblia PESHITTA).
¿QUE
PRONUNCIACIÓN USAR?
La opinión generalizada de la mayoría de los
hebraístas favorecen la fórmula "YAHWEH" como la pronunciación más
exacta. Para ello señalan a la abreviatura del nombre "Yah" , como en
el Salmos 89:8 y en la expresión Ha-lelu-Yáh (que significa "¡Alaben a
Yah!"). (Salmos 104:35; 150:1, 6.) Además, señalan que las formas Yehóh,
Yoh, Yah y Yáhu, que se hallan en la grafía hebrea de los nombres Yahosafat,
Yosafat, Sefatías y otros, pueden derivarse del nombre divino Yahvé. Sin
embargo, debemos notar como dato sobresaliente, la Masora del Salmo 96:11. Las
letras iniciales forman un acróstico del tetragrámaton, YHWH, que es nombre
exclusivo, y por eso, las cuatro palabras transliteradas presentan la lectura
siguiente: "Yis· mlejú Hashshamayim Wethaghil Haarets"
("regocíjense los cielos y esté gozosa la tierra"), lo que le da al
Nombre la pronunciación muy semejante a Yihauéh.
Aun
así, algunos están empeñados en defender que la pronunciación del nombre
especial no es conocida y por consiguiente nosotros no podemos pronunciarlo.
Para refutar este argumento permítanos mirar el Ex 3,13-15:
“Moisés
dijo a Dios: He aquí que cuando yo vaya a los hijos de Israel y les diga: “YAHWEH
el Dios de sus padres me envió a ustedes, y ellos me pregunten: ¿Cuál es su
Nombre?¿Qué les voy a responder? Dios dijo a Moisés: AJYAH ASHAR JEYAH me envió a ustedes. Otra vez dijo Dios a
Moisés: así diras a los hijos de Israel: YAHWEH, el Dios de sus padres, el Dios
de Abraham, el Dios de Isaac y el Dios de Jacob me envió a ustedes. Este es mi
NOMBRE ETERNO, y este es mi memorial por todas las generaciones.”
Así
que, el Creador dice que Su nombre es YAHWEH, en Binyan Kal, Tiempo Futuro,
primera persona del verbo HaYaH (Lihyot) [Seré (Ser)] con la vocalización EHYeH.
Dios ordenó a Moisés que usara la 3 persona del mismo verbo que es YiHYeH o
YiHWeH . La Escritura usa la forma "YiHWeH" en lugar de la regular
"YiHYeH" para distinguir el
nombre especial de la forma común del verbo! Por consiguiente el nombre del
Dios de Israel es "YiHWeH" muy
semejante al YIHAUEH del acróstico del Salmo 96:11, en esto no hay ningún
secreto o misterio. Ésos que pretenden hacer olvidar el nombre han tenido mucho
éxito en su misión y plan de traer un exterminio al pueblo de YAHWEH. Hay pocos
cristianos que conocen el nombre de su
Creador.
También
tenemos las transliteraciones griegas del nombre divino que hicieron los
escritores primitivos de la Iglesia, a saber, IAOUE, IAOUAI, IABE y IAUE (que
en griego se escribe YAHWEH y se pronuncia de modo parecido a Yahvé), indican
una preservación en pronunciación vocálica del nombre divino.
El
Presbítero teólogo griego Tito Flavio Clemente, también llamado Clemente de
Alejandría (150?-215?) dijo, en su obra "Misceláneas" sobre el
NOMBRE: "el Nombre místico con el que se llama al tetragrámaton...es
pronunciado Iaoue (Yah-ueh), lo cual significa, Quien es y Quien será",
así lo da como Iaove.
Orígenes,
(253-54) lo da como ´Iao`, Epifanio (404) IaBe (o Iave en un manuscrito); y
Teodoro (457) dice que los Samaritanos lo pronunciaban IaBe.
La
poesía samaritana preservó la pronunciación del Tetragrámaton y después lo rimó
con palabras que tienen el mismo sonido de Ya-u-ei (Período de Literatura
Bíblica, 25, p.50 y Enciclopedia Judía ,Vol.9, p.161). Por eso, en la Biblia
Samaritana, Benedictino Gilberto Genebrardus (alrr. 1550-1567) a quien se debe
modernamente la proliferación de la pronunciación transliterada del griego,
empleó el cambio de la "B" en "V" adquiriendo la fórmula de
Yahvé.
El
docto Bishop Pearce utilizan las vocales I-A-U-A con la última consonante
"h" terminando el sonido en "ah". Así se pronunciaría, dice
Bishop, algo parecido a YAUAH. En este mismo sentido, el libro "The
Mysterious Name of Y.H.W.H." , página 74, el Dr. M. Reisel dice que
"originalmente la lectura del Tetragrámaton con sus vocales debe haber
sido YaHûàH". También es de la misma opinión Ludwig Koehler y Gualterio
Baumgartner en su Léxico al utilizar la formula "Yahwáh".
¿POR
QUÉ LA TERMINACIÓN "EH" EN VEZ DE "AH"?
El
Dr. Koster, prefiere la terminación masculina acabada en "e",
simplemente porque se observa que siempre que se usa en pronombre para
referirse al Padre, es en masculino,
La
terninación en ÁH, haría que la pronunciación del Nombre fuese algo parecido a
Yahwáh. Pero, como ya saben los lexicógrafos, dicha terminación es femenina en
el lenguaje hebreo, lo cual mostraría al lector que YHWH posee atributos
femeninos.
La
Biblia siempre se identifica al Creador con el género masculino, todos sus
atributos y títulos, y sus verbos relacionados, están en género masculino. Por
lo tanto la parte final del nombre no puede ser «wa» ni «vah», tiene que ser
«weh» o «veh», que es la forma del género masculino en hebreo.
Al
realizar una pregunta con referencia al uso del nombre en terminación femenina,
el profesor Yosef Álvarez, nos dice:
"No
he visto un solo contexto que requiera la pronunciación Yahwah, que es
obviamente femenina. Por el contrario, en Exodo 15:3 dice que Yahweh es un
"varón" de guerra, y siempre se le atribuye el pronombre hu (él) y
nunca hi (ella). Y siempre se le llama "Padre", nunca
"Madre". Puede que en algún pasaje simbolico se lo compare con una
madre, como también se lo compara con un águila, pero no significa que sea
ninguna de las dos."
Ahora
entendemos poqué los Lexicógrafos y eruditos modernos favorecen la
pronunciación Yahwéh como la más exacta, y hasta El Diccionario de la Biblia de
Juan Straubinger 1967, pág 86, indica que "hoy se tiene por seguro que la
pronunciación correcta de este nombre es ´Yahvé`."
Entonces,
¿Qué razones tendrán algunos eruditos para no aceptar la pronunciación
"Yahwéh"?. El comentario que nos da el Moer Yosef Álvarez (Aharoni)
es sustancial:
"Lo
que pasa es que algunos llamados eruditos aceptan que la vocalización que le
pusieron los Masoretas al Tetragrámaton es la correcta. Uno de esos es el judío
karaita Nehemiah Gordon. Otros dicen que no es la correcta pero que no se sabe
cuáles eran las vocales originales. Pero tenemos testimonios antiguos en el
sentido de que los judíos antiguos lo pronunciaban de dos maneras: Yahweh y
Yahveh. También lo llamaban Yah, y Yaho. Pero parece que el sectarismo de
algunos eruditos les impide ver la verdad."
E
ahí la clave del asunto: "El sectarismo", esa es la verdadera razón
que acompaña casi siempre a realzar opiniones por encima de las pruebas
concluyentes de la lexicografía y de la propia evidencia arqueológica.
Es
muy interesante como la ya citada publicación bíblica "Let Your NameBe
Sanctified" publicada pro la International Bible Studens Association de
Brooklyn, N.Y. U.S.A. de 1961, dice en su edición española página 18, párrafo
13, citando además al Lexicon for the Books of the Old testament, por Ludwig
Koehler y Gualterio Baumgartner: "La ortografía incorrecta Jehovah
(Versión Revisada. El SEÑOR) aparece desde aproximadamente 1100," y
entonces ofrece sus argumentos a favor de Yahweh como la "pronunciación
correcta y original."
KETIB
QERE
En
el texto masorético el nombre del Eterno ocurre 6,518 veces y esta vocalizado
(en la mayoría de los casos) como יְהֹוָה.
Ahora, aunque aparece vocalizado de esta manera no significa que esa es
la manera en cómo debe pronunciarse el nombre del Eterno. Como mencione anteriormente, los masoretas
fueron los encargados de poner el sistema de vocalización del Tanaj y debido a
la prohibición de pronunciar el nombre ellos le pusieron las vocales Adonaí. En el texto masoreta existen varias notas al
margen a los lados donde ellos explican algunos cambios que ellos hicieron. Por
ejemplo, ellos diseñaron una regla que se conoce como Ketib Qere la cual
básicamente significa “ketib” se escribe de esta manera (en el caso de יְהֹוָה
) y “qere” se pronuncia de esta manera (Adonaí) la palabra Adonaí en si esta
vocalizada אֲדֹנָי con una sheva pataj y la vocal debajo de יְהֹוָה es una
sheva. Debería sonar a la vocal “a” y no “e” la razón de este fenómeno es que
las jatafim o semivocales como se le conoce en hebreo usualmente aparecen
debajo de las consonantes guturales (א ע ח ה ) y en el caso de YAWEH la primera
consonante es una yod y de este modo la sheva pataj pierde su sonido y se
convierte en una sheva y de esta manera suena con el sonido de una “e” corta.
¿CUANDO SE DEJÓ DE PRONUNCIAR?
Es en el siglo I EC. Cuando se empieza a
observar cierta actitud supersticiosa hacia el nombre de manera muy
generalizada.
La
Misná, con relación al día de Yom Kipur, dice en Yoma VI, 2: "Los
sacerdotes y pueblo estaban en el atrio y cuando oían el Nombre que pronunciaba
claramente el Sumo Sacerdote, se arrodillaban, se postraban con el rostro en
tierra y decían: 'bendito el nombre de la gloria de su reino por siempre y
jamás'".
Sanhedrin
VII:5 dice: "El blasfemo no es culpable en tanto no mencione
explícitamente el Nombre", y añade que en un juicio que tuviera que ver
con una acusación de blasfemia, se usaba un nombre sustitutivo hasta haber oído
todos los hechos; luego se le pedía en privado al testigo de cargo: "Di,
¿qué oíste de modo explícito?", y se empleaba, como es lógico, el nombre
divino.
Cuando
Sanhedrin X:1 menciona a los "que no tienen parte en la vida futura",
observa: "Abá Shaúl dice: también el que pronuncia el nombre de Dios con
sus letras".
El
Dr. A.Cohen, rabí y autor del libro "El Talmud al alcance de todos",
muestra que "una tradición dice que los sabios transmitían a sus talmidím
la pronunciación original a intervalos de una o dos veces cada siete años.
(Kiddushin 71a.) Pero esta práctica se abandonó posteriormente..."
Según
el Talmud se informa que fue a la muerte de Simón el Justo en el 290 AEC, (un
contemporáneo de Alejandro el Grande) cuando el sacerdote dejó de pronunciarlo
durante las bendiciones (b. Yoma 49b).
En
la era del Segundo Templo el Nombre era usado, pero solamente en el Templo
según dice la Mishná al hablar sobre las bendiciones sacerdotales cotidianas,
Sotah VII:6, b Sotah 38b; m. Tamid 7:2 dice : "En el templo se pronunciaba
el nombre como está escrito, en la provincia con una sustitución". De
hecho el nombre era usado en el Templo aun cuando se saludaban, como dice la
Mishná: [hablando sobre el comportamiento en los terrenos del Templo] "Y
ordenaron que un individuo debía saludar a su amigo con el Nombre de Dios, de
acuerdo con lo que se dice, "Y, he aquí, Boas vino a Belén; y él dijo a
los segadores, ¡'YHWH sea con vosotros'! Y ellos contestaban, 'YHWH te
bendiga'" (Rut 2:4) (m.Berajot. 9:5)
El
historiador del primer siglo, Josefo, menciona la prohibición sobre el uso del
nombre de YAHWEH. Josefo, escribiendo sobre los acontecimientos de Éxodo 3
dice: "Con lo cual Dios declaró a él [Moisés] su santo Nombre, que nunca
había sido revelado a los hombres antes; referente a lo cual no me es permitido
a mí decirlo ya más" (Josefo; Antigüedades de los Judíos 2:12:4)
Esta
prohibición de pronunciar el Nombre divino de YAHWEH parece que era universal
para el primer siglo. Aun algunos de los miembros Esenios de la comunidad de
Qumran seguían la prohibición. El Manual de Disciplina dice:
"Cualquiera
que dice en alto el Más Santo Nombre de Dios, ya sea como maldición, o que se
le escapa en un juicio o por cualquier otra razón, o mientras está leyendo un
libro, u orando, ha de ser despedido para nunca más volver a la sociedad de los
Yahad." (1QS Col. 6 línea 27b - Col. 7 línea 2 a)
Después
de la destrucción del Templo en el año 70 EC., los fariseos prohibieron el uso
del Nombre divino completamente. La Nueva Halajá era que el Nombre YAHWEH tenía
que "ser escondido" (b.Pes. 50 a) y "ser guardado secreto"
(b. Kidd. 71 a) y solo se admitía pronunciar el Nombre YAHWEH con
sustituciones, tales como Adonai y Elohím.
También
los Soferím substituyeron en muchos lugares el Nombre Divino de "YAHWEH"
por "Adonai" en el texto mismo. Éstas, en muchas traducciones, han
sido impresas como "Señor". La lista oficial dada en la Masorá
(197:15, Gingsburg edition [Edición de Gingsburg]) contiene los 134 cambios,
hechos por los Soferím o Escribas judíos.
No
obstante para el tiempo de la proclamación del Evangelio del Reino por parte de
los apóstoles, el mesianismo de Nuestro Señor Jesucristo estaba muy extendido
en Israel y fue abarcando todo el vasto Imperio Romano y aunque afloraba el
cisma o la apostasía en el seno de las comunidades cristianas, nuestro Señor Jesucristo
ya había manifestado el Nombre entre sus discípulos y su auténtica
pronunciación fue preservada en las filas cristianas del Israel de Dios: La
Iglesia.
Pues
el Señor siempre a lo largo de todos los siglos ha estado preservando (Juan
17:6) y enseñando a su Pueblo. "He aquí yo estoy con ustedes todos los
días, hasta el fin del mundo" (Mt 28:20, Biblia Peshitta).
¿CÓMO LLEGÓ A PRONUNCIARSE "JEHOVÁ"?
En
el siglo VII EC.. los maestros rabínicos de la escuela del Tiberíades, llamados
"masoretas" (masoreta es derivado de masora: tradición) quisieron
ponerle vocales a las palabras de las sagradas escrituras (pues se escribían
sin vocales y aumentaba cada vez mas la confusión sobre como pronunciarlas). En
cuanto al tetragrama YAHWEH, como nunca se pronunciaba, nadie sabía entre ellos
que vocales le correspondían. Tomaron entonces las vocales correspondientes a
la palabra ADONAI (a-o-a), que era la palabra que leían en substitución del
Tetragrámaton. La letra "i" al final de ADONAI no la contaron porque
para los hebreos es consonante y no vocal. Además, cambiaron la primera
"a" por la letra "e" por razones de fonética semítica
(Según el sistema inventado por los masoretas, la consonante (Y) y primera
letra del Tetragrámaton, por ser consonante fuerte no puede llevar la vocal
"a" que es débil, sino que debe cambiarla por la vocal "e"
que es una vocal fuerte). No obstante estos trabajos de los masoretas, el
Nombre YAHWEH se remplazaba en las lecturas por "Adonai". (Cf.
Enciclopedia Británica, Micropedia, vol. 10).
A
partir de los siglos XIII y XIV de nuestra era, se comenzó por primera vez a
leer el Nombre sagrado del Tetragrama con las vocales que los masoretas le
habían colocado según su invención, es decir, con las vocales
"e-o-a", lo cual dio como resultado YeHoVaH. Esta versión errada se
extendió a la cristiandad así como también en la mágia judía y oriental por eso
no era extraño encontrarse con fórmulas mágicas y amuletos en el siglo XIII con
las pronunciaciones de IAW - IAO- IAWA escritas en diversos lapidarios y
talismanes. Por medio de combinar esos signos vocales de advertencia con el
Tetragrámaton se formaron las pronunciaciones Yehowih y Yehowah dando origen
más tarde a forma latinizada de IEHOVA de donde proviene el actual Nombre en
español JEHOVÁ que se utiliza en la mayoría de las traducciones de La Biblia
hispanas.
En
inglés apareció en la traducción de William Tyndale del Tanaj ("Los Cinco
Libros de Moisés"), publicado en 1530 en Alemania, donde Tyndale había
estudiado desde 1524, posiblemente en una o varias de las universidades de
Wittenberg, Warm y Marburg, donde se enseñaba hebreo. La grafía utilizada por
Tyndale fue "Iehouah"; En ese momento, no se distinguía la I de la J,
y la U no se distinguía de la V. El
nombre de Jehová apareció en todas las tempraneras Biblias protestantes en inglés, a excepción de la traducción
de Coverdale en 1535. La Biblia Católica Romana Douay-Reims usa "el Señor
", que corresponde al uso de la Vulgata latina de "Dominus" (la
traducción del hebreo Adonaí “Señor” al
latín,) para representar el Tetragramaton.
La
Biblia Autorizada King James también, que utiliza Jehová en algunos lugares,
con mayor frecuencia dio "el Señor", como el equivalente del
Tetragramaton. El nombre de Jehová apareció en la Biblia Mateo John Rogers en
1537, la Gran Biblia de 1539, la Biblia de Ginebra de 1560, la Biblia del
Obispo de 1568 y la versión King James de 1611. Más recientemente, se ha
utilizado en la versión revisada de 1885, la American Standard Version, en
1901, y la Traducción del Nuevo Mundo de las Santas Escrituras de los Testigos
de Jehová en 1961. La Biblia Reina
Valera que alcanzó una muy amplia difusión durante la Reforma Protestante del
siglo XVI, y que es una de las más aceptadas por las iglesias cristianas
protestantes (se trata de la Biblia aceptada por las Iglesias Evangélicas del
Mundo Hispánico, e incluso por La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los
Últimos Días, por la Iglesia Adventista del Séptimo Día y por las iglesias
Bautistas,) de igual manera utilizo el termino Jehová como la pronunciación del
nombre del Eterno. Sin embargo el acercamiento es incorrecto por varias
razones:
Primero,
no existe una instancia en las escrituras griegas donde encontremos este
término a excepción de la Traducción del Nuevo Mundo de los testigos de
Jehová. La LXX o Septuaginta como se le
conoce, que es la traducción del texto arameo al griego, cuando traduce la
palabra יהוה "YAHVEH" la traduce por la palabra griega κύριος (Señor)
ya que esta obra fue realizada a mediados del siglo III y obviamente ya existía
la prohibición de pronunciar el nombre Sagrado. Y eso es precisamente lo que
vemos en las escrituras apostólicas el sustituto del nombre, ya sea Shamayim o
ουρανων (uranon) en griego. Hoy surgen
diversos movimientos que son partidarios de reivindicar el uso del
tetragrámaton (YHWH) en los textos griegos mesiánicos allí donde se han quitado
o el contexto lo demanda.
¿QUE IMPORTANCIA TIENE LA PRONUNCIACIÓN CORRECTA?
El
Diccionario de la Biblia (edición de Serafín de Ausejo, Barcelona, 1981, cols.
1340, 1341) dice: "Según la concepción antigua y primitiva, el nombre no
es sólo lo que designa, caracteriza y distingue de los demás a su portador, sino
además un elemento esencial de su personalidad. [...] Si el nombre de alguien
es invocado o pronunciado sobre una cosa, ésta queda íntimamente ligada con la
persona nombrada".
Éxodo
3,14, donde en respuesta a la pregunta ¿Cuál es su nombre? gran parte de las
actuales traducciones de La Biblia dicen como respuesta -Yo soy el que soy-
dando énfasis a la idea de Elohím como un ser viviente y activo, que era, es y
siempre será, como muchos comentadores judíos interpretan la frase citada, en
hebreo: Ehyeh -asher-ehyeh. -
En
este texto de Éxodo 3: 14 otras traducciones vierten como "Seré lo que
seré", como poro ejemplo la Torá, de Daniel ben Itzjak.
Sin
embargo en esta expresión el traducirse por "Yo soy el que soy" no es
en modo alguno correcta ya que la forma del verbo hebreo empleada aquí, a saber
hayah, no significa existir; sino venir a la existencia, acontecer, ocurrir,
llegar a ser, asumir (un atributo), entrar en (un estado), constituir (hasta
cierto punto) por estar el nombre en la forma causativa llamada Hif·´il en la
gramática hebrea. The Journal of Biblical Literature en su tomo 23
página 126 edición de 1904, Pub.Society of Biblical Literature and Exegesis.
En
el texto de Éxodo 3,14, no se hace referencia a la auto existencia de Dios,
sino a lo Él piensa llegar a ser tocante a otros y esto está en armonía con el
Nombre que aparece por vez primera con puntuación vocálica en Génesis 2,4,
identificando a Yah·wéh como "El Que Se Propone hacer".
En
este sentido más ámplio del entendimiento hebreo la traducción The Emphasised
Bible, de Joseph B. Rotherham vierte bastante bien Éxodo 3: 14 diciendo:
"Yo Llegaré a Ser lo que yo quiera"
De
manera que, el significado del nombre del Eterno, nos garantiza que Él llegará
a ser lo que haga falta para cumplir sus planes o designios
(Is
55,8-11)
¿SE ENCUENTRA EL NOMBRE EN EL N.T.?
Durante
mucho tiempo se ha argumentado que el nombre de Yahweh no debió aparecer en el
N.T. ya que los escritores inspirados hicieron sus citas de las Escrituras
Hebreas premesiánicas basándose en la Versión de los LXX, y en esta versión
aparecen solo los términos Kýrios o Theós. ¿Es cierto esto?... Veamos.
Hoy
sabemos que en realidad NO tomaron el texto hebreo, sino el texto ARAMEO, donde
se conservo siempre el Nombre Divino de YAHWEH.
Al
comentar sobre el hecho de que los fragmentos más antiguos de la Septuaginta
contienen el nombre Divino en su forma ARAMEA (inventario núm. 266 de los
papiros Fouad que datan del siglo II o siglo I AEC. , el Dr. P. Kahle dice:
"Ahora sabemos que el texto griego de la Biblia [la Septuaginta], en tanto
fue escrito por y para judíos, no tradujo el nombre Divino por kyrios, sino que
en esos MSS [manuscritos] se conservó el Tetragrámaton con letras ARAMEAS o
griegas. Fueron los cristianos quienes reemplazaron el Tetragrámaton por Kyrios
cuando el nombre Divino escrito en letras hebreas ya no se entendía". (The
Cairo Geniza, Oxford, 1959, Pág. 222.)
Este
cambio, en las Escrituras griegas mesianisticas debió producirse en el
transcurso de los siglos que siguieron a la muerte de Yahoshúa y sus apóstoles,
pues en la versión griega de Aquila, del siglo II EC., el Tetragrámaton todavía
aparece en caracteres hebreos.
Alrededor
del año 245 EC., el famoso erudito Orígenes produjo su Héxapla, una
reproducción a seis columnas de las Escrituras Hebreas inspiradas que contenía:
1) el texto hebreo y arameo original, 2) una transliteración al griego del
texto hebreo-arameo, 3) la versión de Aquila, 4) la versión de Símaco, 5) la
Septuaginta y 6) la versión de Teodoción, y dijo además que "en los
manuscritos más fieles EL NOMBRE está escrito con caracteres hebreos, no del
hebreo moderno, sino del arcaico (ARAMEO)". De hecho, aquí la flecha
amarilla, señala a un detalle de un manuscrito de Habacuq 2-3 en griego de la
versión de los LXX conteniendo el nombre divino de Yahwéh con el Tetragrámaton
en caracteres paleo-hebreos arcaicos.
En
fecha tan tardía como el siglo IV EC., Jerónimo, el autor de la traducción
denominada Vulgata Latina, dice en su prólogo a los libros de Samuel y Reyes:"Y
hallamos el nombre de Dios, el Tetragrámaton, en ciertos volúmenes griegos aun
en la actualidad expresado con las letras antiguas".
En
una carta escrita en Roma en 384 E.C., Jerónimo dice: "El noveno [nombre
de Dios es] tetragrámaton, que los hebreos tuvieron por [a.nek.fo.ne.ton], esto
es, 'inefable', y se escribe con estas tres letras: iod, he, uau, he. Algunos
no lo han entendido por la semejanza de estas letras y, al hallarlo en los
códices griegos, escribieron de ordinario pipi [letras griegas que corresponden
a las romanas pi pi]". (Cartas de San Jerónimo, Carta 25 a Marcela.)
Hay
todavía más prueba de que los discípulos de Nuestro Señor Jesucristo usaron el
tetragrámaton en sus escritos. En la obra De viris inlustribus [Acerca de
hombres ilustres], capítulo III, Jerónimo, en el siglo IV, también escribió lo
siguiente: “Mateo, quien es también Leví, y quien de publicano llegó a ser
apóstol, compuso en primer lugar un Evangelio de Cristo en Judea en el lenguaje
y caracteres hebreos (arameos) para beneficio de los de la circuncisión que
habían creído. No está suficientemente comprobado quién lo tradujo después de
eso al griego. Además, el hebreo mismo se conserva hasta este día en la
biblioteca de Cesarea, tan diligentemente formada por el mártir Pánfilo. Los
cristianos que usan este volumen en la ciudad siríaca de Berea también me
permitieron copiarlo”. (Traducción del texto latino preparado por E. C.
Richardson y publicado en la serie “Texte und Untersuchungen zur Geschichte der
altchristlichen Literatur”, tomo 14, Leipzig, 1896, pp. 8, 9.)
Mateo
hizo más de cien citas de las Escrituras arameas pre mesiánicas. Donde estas
citas incluían el Nombre Divino él se habría visto obligado a incluir fielmente
el tetragrámaton en su relato del Evangelio en ARAMEO. Cuando el Evangelio de
Mateo fue traducido al griego, el tetragrámaton se dejó sin traducir en el
texto griego, según la práctica de aquel tiempo.
No
solo Mateo, sino todos los escritores del Nuevo Testamento citaron versículos
del texto arameo o de la Septuaginta donde aparece el Nombre Divino. Por
ejemplo, en el discurso de Pedro en Hch 3,22 se cita de Dt 18,15, donde aparece
el tetragrámaton en un fragmento de papiro de la Septuaginta fechado del primer
siglo a..C.
De
modo que la cristiandad "reemplazó el tetragrámaton por Kýrios" en
las copias de la Septuaginta. No fueron los cristianos de origen judío del
siglo o II los que suprimieron el Nombre de Dios: YAHWEH, sino personas de
siglos posteriores, "cristianas" que habían corrompido la pureza de
las enseñanzas de Nuestro Señor Jesucristo introduciendo adiciones confusas en
los escritos. (2Te 2:3; 1Ti 4:1.) E He aquí este Fragmento de papiro del siglo
I e.c. que corrobora lo anteriormente escrito al mostrar el nombre en hebreo
YHWH en un texto de la versión griega de los LXX y probando asi que la
"Iglesia Cristiana" (del siglo XIII) distorsionó no solo el
significado exacto del texto original del NT, sino lo más grave aun, borró el
propio Nombre Sagrado del Altísimo para que los feligreses no lo conociesen y
mucho menos pronunciasen.
¿ES "YAH" O ES "YEH" EL COMIENZO
DEL NOMBRE DIVINO?
En
cuanto a la primera parte del Nombre Divino, el Salmo 68:4, y otros, nos
muestra que es «Yah» y no «Yeh», y está vocalizado con «a» en el Texto
Masorético. De hecho, aun en el hebreo moderno, en el Sidúr, se usa el nombre
Yah con referencia al Creador, porque los Rabinos prohíben pronunciar o
escribir el Nombre Divino completo, pero no su forma corta Yah.
Es
interesante a este respecto la nota marginal sobre este Salmo en la Traducción
del Nuevo Mundo en su versión con Referencias, editada por "Watchtower
Bible and Tract Society of Pennsylvania" en 1987, que dice:
"Como
Jah." BHSu(heb.): ki Yah, M(heb.): beYáh, "por Jah". Yah es la
primera mitad del Tetragrámaton, YHWH. Aparece 49 veces en M distinguida por un
punto (mappik) en su segunda letra, y una vez, en Can 8:6, sin el
mappik.TLXXSyVg: "Jehová". Véanse Éx 15:2, n: "Jah";
Ap.1A."
Así,
los editores de esta traducción, reconocen que la forma Yah es la correcta para
la pronunciación de la primera mitad del Nombre.
De
igual manera el Nuevo Testamento interlineal de la misma editora bíblica,
arriba citada, dice en el penúltimo párrafo del prefacio firmado en Nueva York
por el "Comité de la Traducción del Nuevo Mundo" en el día 9 de
Febrero de 1950: "Aunque nos inclinamos a considerar la pronunciación
Yah·weh como la más correcta, nosotros retenemos la forma "Jehovah"
debido a ser la más conocida por la gente desde el siglo 14º.""- pág
23 de "The Kingdom Interlinear Translation of the Greek Scriptures",
ed. 1969 EC (traducción del inglés de la edición de 1969. ).
COMO
SE PRONUNCIABA EN EL PRIMER SIGLO EL NOMBRE
Josefo , historiador judío perteneciente a una
familia sacerdotal, declara en "Guerras de los Judíos", Libro V,
capítulo5, sección7ª , que "HaShem" consistía en cuatro vocales.
Pero, ¿quiere decir esto que Josefo afirma que el Nombre YHWH es realmente
cuatro vocales IAUE?. Veamos más de cerca lo que Josefo dijo realmente en su
crónica:
"En
cuya diadema estaba grabado el santo nombre. Consistía de cuatro vocales."
(Guerra de los Judíos 5:5)
Nota
que Josefo no está diciendo que el Nombre se pronunciase con solo cuatro
vocales, el texto indica que el Nombre "consistía" o estaba
constituido o se apoyaba en cuatro vocales.
Josefo
decía esto porque se estaba refiriendo a la "Santa señal" que llevaba
el Sumo Sacerdote en la tiara o mitra dice así en en Antigüedades Tomo I, Libro
III, capítulo VII, párrafo 6º final: "la frente....estaba cubierta por una
placa de oro con la inscripción el Nombre de Dios en caracteres sagrados".
Josefo
alude a caracteres hebreos arcaicos que eran las letras consonantes que se
apoyaban para su pronunciación en las cuatro vocales IAUE y que solo se
empleaban en el servicio del Templo en raras ocasiones, para la acuñación de
moneda o para la inserción en el texto hebreo cuadrado del Tetragrama en las
copias especiales de la Sagrada Escritura.
¿por qué entonces llama a estas cuatro consonantes
"vocales"? La razón es muy simple; las letras hebreas consonánticas
YOD, HEY, VAV y HEY (que forman YHWH) no tienen equivalentes en griego. Son
transcritas generalmente en griego con letras griegas que son vocales. La razón
de esto es que cuando los griegos
tomaron
prestado el alfabeto fenicio/paleo-hebreo usaron las consonantes sobrantes que
no existían en su lenguaje como símbolos para las vocales, como dice un
artículo de Robert Whiting en The New Book of Knowledge [El Nuevo Libro del
Conocimiento] Vol. 1 p. 193 "Alphabet", Editado por The Oriental
Institute, de la Universidad de Chicago: "Cuando los griegos adaptaron el
sistema de escritura fenicio a su propio lenguaje hicieron un cambio muy
significativo." Crearon signos por vocales y los usaron cada vez que
ocurría una vocal. Los griegos no inventaron nuevos signos para las vocales,
sino que simplemente convirtieron algunos de los signos fenicios que ellos no
necesitaban en su propio lenguaje en símbolos vocálicos.
Como
resultado la YOD hebrea se convirtió en la vocal griega IOTA; la HE hebrea se
convirtió en la vocal griega EPSILÓN y la WAV hebrea se convirtió en la vocal
griega UPSILÓN. Por esta razón, Josefo escribe que las cuatro letras que
aparecían sobre la mitra del Sumo Sacerdote eran cuatro "vocales."
Para los lectores de habla griega de la Edición Griega de las Guerras de los
Judíos, las cuatro letras sobre la mitra del Sumo Sacerdote eran, de hecho,
cuatro vocales.
El
hebreo era originalmente un silabario en el cual cada letra simbolizaba una
pareja consonante vocal, con la vocal siendo ambigua. Como escribe Robert
Whiting en el mismo artículo ya reseñado: "Los pueblos semíticos de Siria
y Palestina desarrollaron sistemas de escritura puramente silábicos, sus signos
expresaban consonantes, más cualquier vocal."
No
fue hasta el siglo IX AEC. que las letras hebreas YOD, HE y VAV comenzaron a
doblarse como vocales (y, sólo entonces, cuando se emparejaron con
consonantes). Como Ellis Brotzman escribe: “A partir del siglo noveno en
adelante, ciertas consonantes llegaron a ser usadas para indicar vocales. Estas
consonantes "de ayuda" son llamadas matres lectionis, literalmente
"madres de la lectura."” (Old Testament Textual Criticism [Crítica
Textual del Antiguo Testamento] by Ellis R. Brotzman p. 40)
Así
que, antes del IX siglo AEC., las letras YOD-HE-VAV-HE (YHWH) eran cuatro
consonantes hebreas. Aun en hebreo posterior una YOD inicial nunca puede
representar una vocal.
El
Tanakh hebreo de las Escrituras pre mesiánicas fue escrito originalmente sin vocales.
Cuando los Masoretas añadieron las puntuaciones vocálicas al texto hebreo en la
Edad Media se encontraron con un serio problema. El Nombre había sido
"guardado secreto" y "escondido" por cientos de años. Como
el texto contenía sólo consonantes en su forma original, las vocales
generalmente era desconocidas. Así que, antes del IX siglo AEC., las letras
YOD-HE-VAV-HE (YHWH) eran cuatro consonantes hebreas. Aun en hebreo posterior
una YOD inicial nunca puede representar una vocal.
PRESERVACIÓN
DEL NOMBRE EN LOS NOMBRES PROPIOS DE PERSONAS
Según
George Buchanan, escritor metodista y profesor emérito del Seminario Teológico
Wesley, de Washington (E.U.A.): "En la antigüedad, los padres solían dar a
sus hijos nombres que incorporaban el de sus dioses, y cuya pronunciación
dependería de la del nombre de la deidad. El Tetragrámaton se empleaba en los
nombres propios y siempre se usaba una vocal intermedia"
Algunos
ejemplos son:
Yeho·sha·fát (Josafat)que significa
"Yhwh ha juzgado" o bien "Yhwh es Juez".
Yehoh·ram (Jorán), que significa "Yhwh
es ensalzado"
Yaho-shúa (Josué - Jesús), que significa
"Yhwh es salvación".
Es
de mucho interés, para saber como se pronunciaba en hebreo el Nombre, la cita
de Juan 17,11-12 sobre una característica más del Nombre Divino. Allí en
oración al Padre, el Señor solicita al Padre que vigilaba a sus discípulos,
¿por qué razón?: "por causa del propio NOMBRE de Elohím que [Yhwh]
"Le había dado". Esto es un hecho probatorio más de que la
pronunciación del nombre es similar a otra de las pronunciaciones del nombre
hebreo para Jesús (Yaho-hshúa) contenedor de la grafía consonántica del nombre
YAH·WÉH.
Además,
cuando observamos otros nombres que terminan con parte del Nombre Divino,
encontramos vocales completamente diferentes en el texto Masorético. Algunos
ejemplos son:
Yeshayahu (Isaías) Yesha- YAHU
Yirmiyahu (Jeremías) Yiremi- YAHU
Eliyahu (Elías) Eli- YAHU
Es
de interés que la grafía "Yaho" nunca se usó en Israel como un nombre
completo sino siempre como una abreviatura del Nombre en nombres compuestos.
Ningún nombre hebreo compuesto con el Nombre Divino usa la forma completa del
Nombre. Nunca se ven nombres como «YahwahShúa» o «YahwehShafát.» Eso no existe
en el hebreo bíblico.
El
Nombre Divino se abrevia con la bisílaba «Yeho», como en Yehoshafát, cuando va
al principio de la palabra y «Yáhu» cuando va al final de la palabra, como en
«Eliyáhu.»
Otra
fuente para la correcta pronunciación del nombre de YAHWEH es el texto arameo
de la Peshita que contiene muchos nombres Yahwisticos. La Peshita es un texto
arameo de la Biblia usado por CRISTIANOS ORTODOXOS asirios, sirios y caldeos que
hablaban arameo. Estas gentes que hablaban arameo cristianizadas en el primer
siglo. Por el siglo IV o V EC.(mucho antes de los masoretas del siglo VI al X)
crearon vocales escritas para el texto arameo. Cuando añadieron vocales a los
nombres que empiezan con parte del Nombre Divino conseguían nombres como
YAHOSHAFAT en lugar de YEHOSHAFAT.
Actualmente
la Biblia Peshitta es usada OFICIALMENTE por la Iglesia Ortodoxa Autocéfala de
las Américas.
EL
NOMBRE DIVINO EN LA GRAFÍA CUNEIFORME
Otra
fuente de evidencia para la correcta pronunciación del nombre de YHWH se puede
encontrar en transcripciones antiguas del nombre de YHWH en escritura cuneiforme,
que distintamente a la escritura hebrea, tenían vocales escritas. En 1898 A. H.
Sayce publicó el descubrimiento de tres tablas de barro cuneiformes del tiempo
de Hamurabi que contenía la frase, "Yahweh es Elohím." (Halley's
Bible Handbook [Manual de la Biblia de Halley] p. 62). Ahora bien, obviamente
el texto decía "Yahweh" y no "Jahweh" como era común de
transcribirlo en el siglo XIX.
También
disponemos de los Documentos de Murashu que son textos arameos escritos en
escritura cuneiforme sobre tablillas de barro cocidas y encontradas en Nippur.
Estos textos se remontan al 464 o 464 AEC. y contienen muchos nombres judíos
transcritos en cuneiforme con las vocales. Muchos de estos nombres contienen
parte del Nombre divino en el nombre. En todos estos nombres la primera porción
del nombre aparecen como YAHO y nunca como YEHO. ("Patterns in Jewish
Personal Names en the Babylonian Diaspora" ["Modelos en los Nombre
Personales Judíos en la Diáspora de Babilonia"] by M. D. Coogan; Journal
for the Study of Judaism [Revista para el Estudio del Judaísmo], Vol. IV, No. 2.
EL
NOMBRE EN AMULETOS MÁGICOS GRECO-ROMANOS
Recopilamos aquí una información por permiso
de José Álvarez en la que se nos muestra como la grafía Iaw era usada para la
pronunciación del Nombre de Elohím en las formulas mágicas citando la
información del siguiente libro de investigación:
“Jewish Symbols in the Greco-Roman Period”
1.
Primero hay que acotar que estos son medallas o símbolos judíos, no griegos,
aunque escritos en el idioma griego. Por lo tanto ellos nos brindan una idea de
la pronunciación judía del Nombre Sagrado en el periodo greco-romano. Estos
medallones eran en muchos casos amuletos mágicos, y la razón por la que
contiene el Tetragrámaton es precisamente porque muchos judíos le adjudicaban
al Nombre Sagrado unos poderes mágicos.
2.
Nótese en el número 1028 que en un lado del amuleto tiene dos formas del Tetragrámaton,
en ambos casos abreviado: IAW y PIP. La forma PIP, abreviación de PIPI era un
intento de representar para el ojo una semejanza del Tetragrámaton hebreo pero
con letras griegas, leído de derecha a izquierda como en hebreo. Si se lee de
izquierda a derecha, como en griego, dice PIPI pero si se lee de derecha a
izquierda como en hebreo dice IPIP. La primera iota griega representa la yod
hebrea, y la segunda iota representa la Waw hebrea. La pe griega, por su forma,
se parece y representa a la he hebrea. De modo que para el ojo judío-griego esa
inscripción se veía como IHUH, que en español sería también YHUH. Por otra
parte, está ahí también la forma IAW que representa, no ya para el ojo sino
para el oído, la manera en que se pronuncia el Tetragrámaton.
3.
En la número 1094 es interesante notar que la inscripción es hebrea aunque
utilizando letras griegas. Dice IAWA BRACAS, que en español es Iawa
bendiciones. Aquí tenemos la forma Iawa en lugar de Iawe; sin embargo eso no
necesariamente significa que lo pronunciaran así porque hay que recordar que
ellos intentaban representar la forma del Tetragrámaton hebreo con letras
griegas, por lo tanto la forma IAWA tendría la intención de que se visualizara
como YHWH, es decir, representaba cuatro consonantes a las cuales había que
añadir vocales en la pronunciación, tal como se hace en hebreo. También es
notable que en el anverso de la medalla se escribe la palabra al revés, WAI, en
lugar de IAW, lo que indica claramente que la intención es que el judío-griego
la lea de derecha a izquierda, para decir IAW.
4.
En la 1092 dice IAW SABAW, que se lee en griego Iao sabaó. Esto es obviamente
una abreviatura del hebreo Yahweh Sabaót (Yahweh de las Huestes, en español),
un título hebreo que aparece varias veces en el Tanakh hebreo. Sin embargo, en
la 1075 aparece el mismo título transcrito más correctamente en griego como
SABAOTH (en inglés lo transcribieron incorrectamente como Sabaoq). El texto
hebreo masorético del Tanakh vocaliza esa palabra como Sebaót, pero las antigua
transcripciones judías en griego tienden a señalar hacia la pronunciación
Sabaót como más antigua.
5.
En la 1073 dice IAW ABRACAZ DOWNAI, que en griego se lee Iao abracaz doonai,
que obviamente representa el hebreo Yahweh Haberakhat Adonay, o sea Yahweh el
Bendito Soberano. Aquí vemos de nuevo la confirmación de que casi todas estas
transcripciones griegas del hebreo son abreviadas, pues Donai es obviamente una
abreviación de Adonay.
6.
Y en la 1074 dice IAW SA-BAOTH A-DONHIH, que se lee: Iao Sabaóth Adoneie (lo
que parece una H española es una E en griego). La observación de todas estas
inscripciones muestra varias maneras divergentes de transcribir en griego las
palabras hebreas. Sin embargo todas concuerdan en que la primera sílaba del Tetragrámaton
se pronunciaba antiguamente IA, y nunca IE. Y esto nos puede llevar a pensar
que lo mismo aplicaría al nombre de los Josué, que el Texto Masorético vocaliza
como Yehoshúa pero nosotros vocalizamos Yahoshúa. Y los textos arameos
concuerdan con esto pues vocalizan los nombres teofóricos como, por ejemplo,
Yahoshafat y Yahoram, y no como Yehoshafat y Yehoram, como los tiene el Texto
Masorético. Todo esto señala a Yahoshúa como una pronunciación más antigua que
Yehoshúa. Vemos pues que las antiguas inscripciones judías en idioma griego
arrojan mucha luz sobre la manera en que se pronunciaban en la antigüedad
ciertas palabras hebreas que en el Texto Masorético del Tanakh aparecen
cambiadas. Lo que ciertamente confirma nuestra corrección en el uso de nombres
hebreos antiguos como Yahweh y Yahoshúa.
LAS
IMPLICACIONES EN EL USO DE LA PRONUNCIACIÓN JEHOVÁ
Ya
hemos visto cómo la primera parte del Nombre Sagrado “Yah” fue cambiada a “Jeh”
cómo se desarrolló la “J” y cómo la “a” fue reemplazada por la “e” para ocultar
el Nombre.
No
obstante también hay implicaciones contradictorias ante el sufijo “hovah” es el
No. 1943 en el diccionario hebreo de Strong y tiene el significado de
“desastre.” Esta es otra forma del No. 1942, havvah, que es traducida como
“calamidad, iniquidad, travesura, dañina (cosa), desobediencia, desobediente,
asqueroso, cosa perversa, sustancia, muy perverso.”
Brown,
Driver, Brigg, Gesenius dicen del No. 1943, hovah: “ruin, desastre.”
En
esto podemos ver lo inapropiado de llamar Jehová al Creador del Universo –el
único que nosotros adoramos. Porque al llamarlo por ese nombre híbrido estamos
en realidad suplicando a un poder cuyo nombre significa, “El creador de la
destrucción, creador de las travesuras, creador de calamidad, de la iniquidad,
de la desobediencia, de las cosas perversas, de lo muy perverso.” hasatán
seguramente tendría un día de fiesta cuando la humanidad ignorantemente se
refiere a Yahweh con el nombre de Jehová –¡un nombre que perfectamente le
corresponde a él como destructor!
YAHWEH
EN LOS DIEZ MANDAMIENTOS
La
mayoría de los cristianos no están enseñando la importancia de observar TODOS
los Mandamientos. La mayoría pasa por alto los primeros cinco y se concentra en
aquellos mandamientos que tratan de nuestros semejantes: asesinar, mentir,
robar, adulterio, codiciar. Estos ciertamente son importantes para guiar nuestra
vida diaria.
Pero
¿no es igual o de MAYOR importancia que nosotros sirvamos fielmente a nuestro
Padre Celestial Yahweh de la manera que él espera? Hablamos repetidamente a
través de LA BIBLIA reverenciar Su Nombre.
¿Cómo podemos reverenciar Su Nombre si nunca
invocamos el Nombre que Él ha revelado amorosamente a Su pueblo? ¿Podemos poner
a un lado Su Nombre e ignorarlo?
Note
que los primeros tres de los diez mandamientos tratan de YAHWEH y Su poderoso
Nombre. En el original arameo, los primeros cinco mandamientos usan Su nombre
YAHWEH ¡diez veces! Nuestro Padre Celestial inspiró a Moisés para colocar el
Nombre YAHWEH en Su Palabra para que así nosotros pudiéramos conocer a quién
servimos.
El
tercer mandamiento específicamente dice que no debemos jurar en falso en Su
Nombre. Reverentemente debemos considerar Su Nombre como leemos en Mal 3,16: “Aquellos
que reverenciaban a YAHWEH hablaron el uno con el otro, y YAHWEH puso atención
y escuchó; e inscribió ante Él en el libro de las memorias a los que lo
reverenciaban y alababan SU NOMBRE.”
Apocalipsis
3,5 muestra que Nuestro Señor Jesucristo no borrará el nombre de aquellos que
vencieren, pero confesará sus nombres frente al Padre Celestial. (Vea también
Ap. 13:8, 17:8, 20:12, 15, 21:27, 22:19). Si los nombres de simples humanos son
importantes para el libro de salvación, ¿Cuánta mayor importancia tiene el
Nombre del Padre Celestial YAHWEH para nosotros?
LLAMADOS
EN SU NOMBRE
YAHWEH
habla de su pueblo en esta forma: “Además mi pueblo conocerá mi Nombre…” (Isa.
52:6).
El
profeta Daniel en una petición al Todopoderoso YAHWEH dice, “Oh Yahweh escucha;
Oh Yahweh perdona; Oh Yahweh, oye y haz; no tardes, por amor a ti mismo, Oh mi
Señor: porque tu Ciudad y tu Pueblo son llamados por invocar tu nombre” (9:19).
Cuando
nos damos cuenta de que Yahweh está creando una familia de personas obedientes
en la tierra quienes los reverencian a Él y Su Nombre, entonces comprendemos la
importancia de este nombre familiar y lo que significa para ser llamados por
él. “Por esta causa doblo mis rodillas ante el Padre de nuestro Señor Jesús el
Cristo, de quien toda la familia en el cielo y la tierra es llamado” Efe.
3:14-15.
PROFECÍAS
DE RESTAURACIÓN DEL NOMBRE
La
RESTAURACIÓN del uso del nombre de Yahweh con su correcta pronunciación es
proféticamente significativa y descrita en las Escrituras pre cristianas (se
emplea abajo la versión de la Biblia de Jerusalén):
“Yo entonces volveré puro el labio de los pueblos,
para que invoquen todos el nombre de Yahveh, y le sirvan bajo un mismo yugo.”
(Sofonías 3:9)
"Por
tanto, he aquí que yo les hago conocer - esta vez sí - mi mano y mi poderío, y
sabrán que mi nombre es Yahveh." (Jeremías 16:21)
“Por eso mi pueblo conocerá mi nombre en aquel día y
comprenderá que yo soy el que decía: « Aquí estoy »” (Isaías 52:6)
¿POR QUÉ RESTAURAR LA PRONUNCIACIÓN DEL NOMBRE?
La
contestación a esta pregunta es significativa, amen de que cada vez más
traducciones nuevas o revisadas ya no emplean siquiera el Nombre Divino.
Sinceramente creemos que se debe hacer un llamado a los que de una manera u
otra tienen responsabilidades en acercar las Escrituras a la gente, estamos en
perfecta armonía con las palabras que en su día dijo el notable traductor
bíblico, El Dr. Rotherham, quien dijo en la pág. 24 de su Introducción a la
Biblia Enfatizada: “Porque su eliminación fue un error. Nunca es demasiado
pronto para corregir un error tan grave. Se ha tomado una libertad
ingarantizable; la senda de la humildad requiere que volvamos a trazar nuestros
pasos.”
Dice
además el Dr. Rotherham: “La pronunciación Jehovah era desconocida hasta el
1520, cuando fue introducida por Galatino, pero fue refutada por Le Mercier,
por J. Drusius, y por L. Capellus, como contraria a la propiedad gramatical e
histórica." ... “Erróneamente se ha escrito y pronunciado Jehovah, que es
meramente una combinación del Tetragrámaton sagrado con las vocales de la
palabra hebrea para Señor, que los judíos sustituyen por JHVH, porque se
abstienen pronunciar el Nombre, debido a un concepto erróneo dos pasajes: Exo.
20:7 y Lev. 24:16. Darle al nombre JHVH las vocales de la palabra para Señor
(Heb.Adonay) y pronunciarla Jehovah, es casi tan híbrido como sería deletrear
el nombre Germany con las vocales del nombre Portugal, es decir, Gormuna. La monstruosa
combinación Jehovah no es más antigua que los alrededores del 1520 D.C."
CONCLUSIONES
FINALES
Se
debe reconocer perfectamente que la fórmula Yahwéh del Nombre Divino es la más
acertada desde la óptica de pronunciación hebrea hoy por hoy conocida (la h del
medio se pronuncia como una j suave y la w como una doble u inglesa).
No
obstante, para los que no estén de acuerdo con este artículo, queremos decir
que los responsables de esta web no "debatirán con sus lectores..."
como hicieron algunos en la antigua Éfeso en el I siglo EC. (Efesios 2:23-25).
Trataremos
siempre con amabilidad a quienes puedan opinar de manera diferente, de modo que
premie más el amor y la unidad entre los creyentes del Cristo, tal y como nos
exhorta Filipenses 2: 14.
Al
realizar oraciones personales al Padre, algunos emplean la pronunciación
clásica masorética reconocida y otros su pronunciación más hebraica, tanto en
el caso del Nombre Divino del Padre como en el caso del nombre propio del Hijo.
Creemos que esto es una decisión muy personal, rara vez encontramos una oración
dirigida a Elohím del propio Hijo de Él con el uso del tetragrama, más bien el
empleó la voz aramea "Abba" o papá, para indicar una relación
sumamente estrecha con la Deidad. Estamos seguros de que muchas oraciones
sinceras llegan al Creador de los muy diversificados idiomas humanos y dialectos,
aparte del arameo, la lengua de Nuestro Señor Jesucristo. El Salmo 65,2 dice:
"Tú oyes la oración; a ti vendrá toda carne" es decir, gentes de
todas las naciones.
Nuestro
Señor Jesucristo dio a conocer ese Nombre a sus discípulos (Jn 17:26) Es lógico
que el Creador lo haya preservado y transmitido a lo largo de los siglos
mediante los "hermanos del Señor", defensores y custodios del NOMBRE
DIVINO que dura por siempre y para siempre. (Mat 28:20.) Con razón entendemos
ahora por qué se dice la Enciclopedia Judaica que "la pronunciación del
Nombre Divino nunca se perdió". El Salmo 9:10 dice "Los que conocen
tu Nombre confiarán en ti".
Jesucristo
está con nosotros todos los días hasta el fin del Mundo, es apropiado que la
preservación de la verdadera pronunciación del Nombre estuviese entre EL LEGADO
otorgado a los HIJOS del Reino (los cristianos). Por ende, las promesas
proféticas nos dan indicación que en la Nueva Era Mesiánica, por todo el Orbe
se revelará la pronunciación del Nombre Divino en el idioma internacional
adámico que se utilice entonces, pues Zacarías 14:9 dice: "Y será YAHVEH
rey sobre toda la tierra: ¡el día aquel será único YAHVEH y único su
nombre!".-Biblia de Jerusalén. 1967.
Como
en todas las cosas, ¡se experimentará también una internacionalización en la
pronunciación del Nombre Divino que durará para siempre!
¡¡Amen y Amen!!
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